El legado y empeño familiar se reflejan en cada taza de nuestro café.
El cultivo de café en la Familia Fallas Mora se remonta a tres generaciones. Nuestra historia comienza con el abuelo Herminio Fallas Jiménez, un pionero en la producción de café en nuestra comunidad.
Herminio cultivó y cuidó sus plantaciones durante décadas, transmitiendo todo su conocimiento a su hijo Eliécer Fallas Mena. Nuestro padre, heredó el gen del café, impulsando la producción de un café de altura y calidad excepcional.
Deyner Fallas, el hermano mayor de la familia, siempre ha sido un apasionado del cultivo del café. En 2012, decidió fundar el Microbeneficio Cerro Verde con el objetivo de procesar nuestro propio grano, asegurando así un control total sobre la calidad.
El nombre Cerro Verde proviene de su ubicación frente al cerro El Dragón, conocido por su imponente belleza y su característico color verde.
El Microbeneficio Cerro Verde se encuentra en la Zona de los Santos, en la región cafetalera de Tarrazú, específicamente en San Francisco de León Cortés. La finca y las instalaciones están situadas a 1,930 m.s.n.m.
La altitud, combinada con las características del suelo, el microclima, el cuidado meticuloso de nuestras plantaciones y el procesamiento artesanal, resultan en un café de especialidad de calidad superior.
Actualmente, nuestra dedicación y compromiso continuán, centrándose en la producción de cafés especiales en microlotes destinados principalmente a la exportación. Con un enfoque firme en la calidad, hemos logrado ingresar en mercados clave como Japón, Estados Unidos y Europa, estableciendo relaciones sólidas y duraderas con nuestros clientes.
Somos un microbeneficio comprometido con la conservación del ecosistema que nos rodea.
Durante la recolección, aseguramos que los granos alcancen su maduración óptima para máximizar sus propiedades organolépticas. Una vez recolectados, pasamos al proceso de beneficiado húmedo artesanal.
El microbeneficio fué diseñado aprovechando el relieve natural del terreno, el cual facilita el arrastre de la fruta. Utilizamos un sistema circular de agua y un desmucilaginado mecánico, logrando un consumo mínimo de agua y electricidad.
Tras el proceso de beneficiado húmedo, el café se coloca en camas africanas para su secado al sol, hasta alcanzar el punto ideal de humedad. Para asegurar la calidad, realizamos cataciones periódicas y exhaustivas. Una vez catado, el café se deja reposar en almacenamiento antes de ser distribuido a nuestros clientes.
Nuestros clientes pueden conocer toda la historia detrás de nuestro café, desde la preparación de los suelos hasta el café en su empaque final de cada uno de nuestros microlotes. A lo largo de toda la cadena de producción y los distintos procesos, cuidamos cada detalle para asegurar la calidad que nos caracteriza.
Actualmente, Ofrecemos las siguientes variedades de cafés especiales:
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